El crecimiento de la cadena Starbucks ha sido uno de los más espectaculares de las últimas décadas. Lo más sorprendente es que su éxito no se basa sólo en la calidad del café que sirven, sino que responde a la aplicación de diez principios que son igualmente útiles para aplicar en cualquier iniciativa empresarial o en las decisiones que debamos tomar en nuestra vida cotidiana. La filosofía de Howard Behar, quien lideró la expansión de Starbucks por todo el mundo, se basa en algunos pilares que pueden no resultar novedosos pero sí muchas veces olvidados tales como establecer objetivos, fomentar la confianza y transformar los sueños en oportunidades de futuro. Para ello, el primer paso consiste en recordar una gran verdad que a menudo perdemos de vista: antes que clientes, ejecutivos o empleados, somos seres humanos. En un mundo cada vez más impredecible, el ejemplo de Starbucks nos muestra que es posible valorar las relaciones personales y triunfar haciendo lo correcto.