Reseña de Carlos Rogel Vide . "Javier Arribas nos retrotrae, con nitidez y mediante una erudición amable, con notable pulso y ritmo narrativo, a la Grecia Clásica y a los Juegos Olímpicos que se celebraban periódicamente en ella. La novela gira en torno a Nikolai, natural de Argos, protagonista de la misma, que se prepara en cuerpo y espíritu durante años para ser vencedor del pentatlón, prueba por excelencia de los juegos, con competiciones de velocidad, salto, disco, jabalina y lucha, en busca de la gloria olímpica.Nikolai recorre Grecia entera, visitando y conociendo sus ciudades, muchas veces enfrentadas entre sí, a salvo el paréntesis de la Tregua Sagrada, de la Paz Olímpica. Conoce a los grandes hombres del arte, de la filosofía y de la política (Fidias, Policleto, Sócrates, Anaxágoras, Pericles...), que hablan de sus obras o nos las muestran. Transita a lo largo y ancho del Peloponeso, alegre y bullicioso entonces, conociendo a gentes dignas de ser queridas, algunas de las cuales son perdidas, desgraciadamente y a la postre, quedando otras con las que armar el futuro. . Una novela histórica más que interesante, adobada con algunos laísmos, mantenidos como licencias poéticas, como testimonio del propio origen. A lo largo de la misma aparecen ciudades (Pireo, Megara, Corinto, Esparta, Atenas, Tirinto, Nafplión, Samos y Éfeso) crecidas, hoy, en ocasiones, y casi desaparecidas en otras, al lado de dioses del Olimpo un poco olvidados por nosotros, Como Rea y Cronión, que dejaron su cetro a Zeus, deidades también Palas Atenea y Apolo, todo ello en medio de una historia de amor entre Nikolai y Leda que no rompe la distancia, ni tan siquiera, enteramente, la muerte"