El despertar de la década de los 90 señala días de euforia y locura colectivas, con músicos reales perdidos en su arte e intentando dar lo mejor de sí mismos con cada nueva grabación. Hablamos de una época en la que el talento parecía tener la misma importancia que el resto de exigencias puestas encima de la mesa de las grandes discográficas multinacionales. Además supone un periodo tristemente irrepetible ya que parecía que por una vez los “raros” íbamos a ganar la partida… Este es el punto de inicio de esta historia con curvas. Este libro, escrito con las tripas y el corazón, propone una mirada intensa y exhaustiva.