Sólo existe una persona capaz de decir algo nuevo sobre Pitita Ridruejo: ella misma. La musa de Francisco Umbral, la mujer cuyo estilo fascinó a Federico Fellini tanto como a Salvador Dalí, la amiga discreta de Pat Kennedy, Margarita de Inglaterra y tantos otros personajes célebres, abre las puertas de su memoria para compartir con sus admiradores los momentos más importantes de su vida. Madrid, Londres, Marbella, Filipinas y la India son los principales escenarios en los que transcurre esta obra, llena de anécdotas y curiosidades sobre el gran mundo, pero también de momentos de profunda ternura. Esperanza Ridruejo, Pitita, es mucho más que la gran dama que supo desempeñar espléndidamente su papel de embajadora en Madrid y Londres y cuyo nombre será siempre sinónimo de elegancia. Es, ante todo, una mujer sincera y generosa, que ha logrado ver satisfechos sus anhelos de espiritualidad y para quien la palabra armonía es una serena declaración de principios.