En este manual, el autor establece una serie de diálogos entre los diferentes elementos del museo (arquitecturas, objetos, usuarios y museografías). Partiendo de la planificación y programación necesarias, se exponen situaciones que ayudan a la toma de decisiones y cuestiones técnicas del trabajo en los museos. Se analizan el espacio o la gestión de colecciones, la conservación y la iluminación, o la difusión y la comunicación, centrándose especialmente en el montaje de exposiciones temporales. A partir de este trabajo se concluye la necesidad de estimular la confianza de usuarios y responsables de las administraciones, mediante una buena planificación y la gestión de calidad, así como la tendencia a la sostenibilidad y la gestión de recursos, imprescindibles en los nuevos planteamientos. Se apunta a la información y el conocimiento como recursos museográficos a explotar en la institución y la necesaria apertura de los museos a la incorporación de los usuarios a través de las nuevas tecnologías. La museografía expositiva está cambiando para adaptarse a una sociedad que demanda otras formas de comunicación, y el museo debe estar abierto a las nuevas tendencias.