El 3 de noviembre de 1846 Margarita, la Madre de Don Boscom se traslada al Oratorio de Turín, junto con su hijo, y comienza a ser, para los jovencitos «Mamma Margherita». Lleva la cocina, lava la ropa, arregla la casa, planta el huerto, atiende a todos. Cuando su hijo se queda sin dinero, vende todo lo que tiene y se dedica por entero a los jóvenes. Hoy, es modelo de madre y educadora cristiana. Está en curso su causa de beatificación.