Los malos tratos a los hijos menores ha sido una constante histórica justificada en el entendimiento de que la patria potestad era un poder que incluía, necesariamente, dentro del deber de educación y formación, las facultades paternas de corregir y castigar a los hijos. Sin embargo, en los últimos años el legislador ha dado un giro copernicano en esta materia y ha pretendido atajar dicho problema social, estableciendo medidas desde diferentes ámbitos. El libro tiene por finalidad el estudio de la normativa jurídico-civil últimamente publicada sobre medidas de protección contra la violencia en el hogar, y de la doctrina judicial vertida sobre determinadas instituciones jurídico-civiles protectoras de menores. La obra constituye un instrumento de gran utilidad, tanto por el análisis crítico a la respuesta judicial dada hasta la fecha en relación con esta materia, como por la interpretación de las instituciones jurídicas que tradicionalmente se han encargado de la protección de los menores, a la vista del nuevo marco legal adoptado.