sta ahora, he conseguido sobrevivir. Podríais pensar que después de que me secuestraran cuando era una niña, de pasar recluida mi adolescencia y de que me soltaran para convertirme en catadora de venenos, ya habría soportado bastantes cosas. Pero no. El descubrimiento de mis capacidades mágicas, poderes prohibidos en Ixia, ha desembocado en una orden de ejecución. Mi única opción es huir a Sitia, donde nací. Sin embargo, Sitia es un lugar desconocido y me tratan como al enemigo, incluso mi propio hermano. Además, no puedo controlar mis poderes. Quiero aprenderlo todo sobre mi magia, pero no hay tiempo. Ha aparecido un mago deshonesto y yo soy su siguiente víctima. ¿Mis capacidades mágicas me salvarán
o serán mi ruina?