Acrósticos, palabras y letras bailarinas que se adueñan del papel, poemas traviesos que no tienen un pelo de tontos... al contrario de lo que sugiere el título. La obra de Beatriz Giménez es un conjunto de 25 composiciones estructuradas en un principio, un final y, entre ambos, tres partes dedicadas a los versos que huyeron por aire, por mar y por tierra. Los primeros se los tragó un gallo-veleta; los segundos los encontró la sirena Flora; y los últimos los recogió un escarabajo pelotero. Los versos del libro tonto es la ganadora del III Premio Internacional Ciudad de Orihuela de Poesía para Niños, organizado por la Concejalía de Educación del Ayuntamiento de Orihuela y FAKTORÍA K, al que optaron 153 trabajos. El jurado valoró que se trata de un texto circular que invita al juego poético de principio a fin, donde se desparrama la magia de los versos, y los personajes -simpáticos, divertidos y alegresbuscan a la poesía hasta encontrar un final que cierra el texto, aproximando el libro a las manos del lector.