Una nueva edición, con estampación en oro en la cubierta, muy manejable y ligera de Los Santos Evangelios, gracias a su formato pequeño y al papel biblia. Así, el lector podrá tener el texto bíblico siempre a mano, en el bolsillo, en el bolso, en el cajón del escritorio o de la mesilla de noche, disponible para leerlo en cualquier momento y lugar. Porque, como dice el Papa Francisco, lo importante es «leer la Palabra de Dios: es Jesús quien nos habla allí».