En Los países invisibles, premio Juan Gil-Albert Ciutat de Valencia, Eduardo Lalo afirma categóricamente la inexistencia de Puerto Rico, traducida en su invisibilidad ante la mirada ajena, así como de algunos países de occidente, «que detentan el poder de crear significados». El libro, género híbrido entre el diario de viajes, la crónica y el ensayo filosófico, recoge las experiencias de un escritor que parte de la isla, «el reino de lo invisible», y regresa a ella después de realizar un periplo narrativo y filosófico por España y otros lugares de Europa.