En nuestros tiempos, la producción de contenidos es de tal magnitud que la conservación de estos últimos queda relegada a un segundo plano. La tecnología no ayuda a preservarlos. Lo que hoy se emite en los medios será, en el futuro, el patrimonio de nuestra sociedad. Conservarlo y mantenerlo vivo es un reto que implica no solo a los periodistas, sino a toda la sociedad. Aquí se explica cómo hacerlo.