Este libro ofrece una reflexión singular sobre la relación entre la Belleza en sí y los caminos por los que hay que buscarla. Una reflexión que es típicamente vocacional, porque la llamada que viene de Dios, Belleza Absoluta, ¿no es acaso una invitación a reproducir esa Belleza infinita en la medida, pequeña y limitada, de la vida de cada uno de los llamados?