Una recomendación: subid al castillo de San Jorge al atardecer. No os arrepentiréis, pues la visión de un sol que lánguidamente se deja caer tras la ciudad de Lisboa, esa alfombra de tejados rojos, será una imagen que siempre permanecerá unido al recuerdo de vuestra estancia en la ciudad portuguesa. Después bajad y tranquilamente recorred la ciudad. Os proponemos abordar la visita de la ciudad barrio a barrio, como si deshojárais lentamente esta bella flor: Baixa y Rossio, Barrio Alto, Chiado y Casi Do Sodré; Madragoa, Lapa, Santos y las Docas; avenida de Liberdade, Rato y el barrio de Santa Ana; Alfama, Mouraria, Castelo Sao Jorge y Graça; Parque de las Naciones, Belém y Ajuda. El plano desplegable que encontraréis al final de la guía os será de gran utilidad para no perder comba en ningún momento. Y si os sobra tiempo, y fuerzas, no dejéis de visitar los alrededores de Lisboa: Queluz, Estoril, Cascais, Sintra o Setúbal, entre otros sitios igualmente recomendables de este bello rincón del mundo. La descripción que se ofrece de cada barrio viene acompañada de recomendaciones de establecimientos donde comprar, tomarse un helado, disfrutar de la afamada repostería lisboeta, dónde tomar una copa o donde bailar, por ejemplo, además de lugares donde alojarse o comer, clasificación organizada según precio, desde los más baratos hasta los sitios más selectos para presupuestos más holgados. Os recordamos leer el capítulo " Generalidades " , al comienzo de la guía, pues brinda interesantísima información sobre la ciudad. Un viajero informado es un viajero que aprovecha el tiempo al máximo. Desde datos prácticos como transportes, direcciones útiles, clima, etc., hasta apuntes curiosos y culturales –historia, gastronomía, personajes célebres, los museos, festividades y costumbres, el fado, el idioma…– que os ayudarán a captar mejor la atmósfera y la personalidad de esta ciudad milenaria.