Un artista dibuja una línea con su lápiz, los patines de una niña siguen esta línea. De repente, estamos ante un estanque congelado. Página tras página, nos deslizamos siguiendo el movimiento que crea el baile de la niña sobre el hielo. Sin embargo, una caída inesperada, nos obliga a preguntarnos: ¿qué es real y qué es fantasía en esta historia? La aclamada artista coreana vuelve tras Espejo, La ola y Sombras, con una original propuesta en la que las imágenes construyen una narración con varias capas de significados. Un tierno ejercicio visual que atrapará tanto a grandes como a pequeños.