Los limones no son rojos, y las zanahorias no son moradas. Eso todos lo sabíamos. Lo que jamás imaginamos es que un libro pudiera hacer tan sorprendente el mundo del color. ¿Qué cara pondrán los niños cuando, con sólo pasar la página, descubran que pueden cambiar el color del césped, el de un flamenco y hasta el de la Luna?. Con este libro, Laura Vaccaro Seeger otorga a los más pequeños el poder de jugar con los colores que los rodean. Un libro divertido que los niños deben hojear una y otra vez para encontrar entre sus páginas todas las sorpresas y posibilidades que ofrece.