El año 1188, y por encargo del rey, Nezamí se inspira en un relato popular, con numerosas versiones en prosa, para escribir una gran obra poética que por vez primera ve la luz en castellano traducida directamente del original. La historia de Leyli y Majnún representa una de las cumbres de la literatura en lengua persa. Dos jóvenes de tribus enfrentadas entre sí se enamoran nada más verse; sin embargo, la imposibilidad de alcanzar el amor de la amada convierte al amante en un loco (majnun) que reniega de la vida en sociedad y se retira para honrar las excelencias del amor y de su amada. La versión castellana de M. Kangarani conserva la versificación original, reproduce la forma poética de Nezamí y las características de la lengua farsí. Esta joya literaria se ha revelado desde antiguo como fuente de inspiración tanto en Oriente como en Occidente; incluso puede considerarse el Romeo y Julieta de los desiertos arábigos.