La comprensión lectora es una destreza idiomática resultado de la interacción texto-lector: leer es interpretar, transformar en una representación mental propia lo que otro ha escrito. Pero la lectura es también una destreza social, y como tal una imprescindible herramienta en nuestra vida académica, profesional... Asumiendo ambas perspectivas, este libro intenta proponer ciertas pautas de interpretación y uso de algunas de las más importantes formas textuales como garantía de eficacia comunicativa y social: textos literarios, periodísticos, textos jurídico-administrativos, textos comerciales y mercantiles y textos electrónicos, acercando al lector a sus características internas y a su particular organización.