Las cruzadas son un episodio histórico en el que confluyen componentes religiosos, sociales y políticos inextricablemente asociados. Es por ello que el modo en que Zoé Oldenbourg aborda el tema en esta obra resulta especialmente efectivo y esclarecedor. Centrándose en la primera etapa de las cruzadas, que abarca de 1096 hasta finales del siglo XII, se remonta a los orígenes de este movimiento y a las relaciones que estableció el Occidente latino con las dos grandes civilizaciones orientales, Bizancio y el Islam, para detenerse luego en las particularidades de Jerusalén, Estado franco nacido de un brutal espíritu de conquista que acabaría por convertirse en el mediador entre Oriente y Occidente, y que debido a su situación geográfica se vería obligado a subordinar la religión a los intereses de Estado, antes de ser víctima de la embestida de un fanatismo religioso que, en alguna medida, alimentó y propició. Paradójicamente, con el derrumbe del esplendor bizantino y el nacimiento del panislamismo, la Cristiandad se vería entonces muy seriamente amenazada. Zoé Oldenbourg es una prestigiosa autora en el campo de las cruzadas y el catarismo. Esta obra junto a "La hoguera de Montsegur", también de Oldenbourg, es la obra cumbre de una de las mejores conocedoras de la historia medieval y una de las que mejor ha sabido transmitir el conocimiento y la pasión que despierta entre quienes se acercan a ella.