Ricardo Salazar, un joven abogado con vocación periodística, se ve arrollado por las circunstancias que lo llevan a la investigación de un crimen, perpetrado en la persona del hijo de uno de los clientes del bufete de abogados de Madrid al que pertenece. Los indicios le llevan a un fuerte grupo mafioso instalado en Marbella, con el que tiene que relacionarse para buscar las pruebas que inculpen a uno de sus componentes. El peligro acecha al joven investigador, al tener relaciones amorosas con una antigua amante del principal sospechoso. Una historia llena de intriga y sexo, en la que los personajes se van cruzando en la trayectoria de la investigación.