Como vecino de la Serra, Pepe Puig nos introduce en la historia y vicisitudes de su pueblo y sus núcleos pedáneos. Cómo organizaban su día a día, desde la enseñanza primaria hasta los trabajos tradicionales, como las carboneras, los molinos o el comercio de la nieve, hoy desaparecidos. Un último apartado repasa las genealogías de las familias locales, desde finales del s. XIX hasta la actualidad.