Los libritos de la colección «Pequeños Clásicos Ilustrados» rescatan el formato y las ilustraciones de los antiguos libros educativos de textos sencillos, repetitivos, acompañados de cándidos dibujos al óleo, y los trasladan hasta la actualidad para elaborar un hilarante retrato de la sociedad en que vivimos. En esta ocasión, su irónica mirada se posa en el extraño fenómeno que se sucede a algunas noches oportunamente olvidadas: la resaca. * Algunos síntomas de la resaca se deben a las impurezas que penetran en el organismo junto con el alcohol. * Entre dichas impurezas se cuentan el metanol, la acetona, el acetaldehído, los ésteres, los taninos, las bolsas de ganchitos, las empanadillas congeladas y las hamburguesas de tres pisos. Es una enfermedad sin cura, una afección que distorsiona nuestra percepción del mundo, nos adormece la lengua e inhabilita toda dignidad. Hablamos de la resaca, el extraño fenómeno que se sucede a noches a las que nuestra memoria parece haber relegado al más oscuro rincón de nuestra mente. Por suerte, este librillo ofrece un hilarante recordatorio de nuestras vergüenzas y sus consecuencias. Comprender los comportamientos y los clichés sociales no es tarea fácil. Por ello, los libros de la serie «Pequeños Clásicos Ilustrados» ofrecen sencillas explicaciones para el día a día: comprender circunstancias concretas, identificar a cierta tipología de individuos y, en definitiva, aprender a moverse en el fangoso terreno de nuestra cultura. «PEQUEÑOS CLÁSICOS ILUSTRADOS»Para los adultos desorientados por la modernez del mundo