El siglo XX ha sido considerado como «el siglo de la guerra total» pero el autor de este libro sostiene que este fenómeno empezó mucho antes, en la época de Napoleón. Centrado en las guerras napoleónicas, las presenta como si constituyeran la «primera» guerra mundial, antes de las de 1914 y 1939. Según su tesis, el modelo de «guerra total» nació entre 1792 y 1815 y ha marcado toda la Edad Contemporánea, incluyendo el siglo XX. En ese periodo la antigua guerra aristocrática y la nueva guerra total se enfrentaron en múltiples ocasiones. Es en aquellos conflictos donde muere el viejo modelo aristocrático de guerra, que tenía unos objetivos militares acotados y con estrategias y artes bélicas sometidas a las reglas del honor. Las guerras napoleónicas fueron mucho más mortíferas que las anteriores, los países sufrieron numerosas masacres masivas que afectaron también a la población civil, y todas las naciones implicadas mostraron una voluntad de, no sólo vencer, sino de destruir totalmente al enemigo y sus recursos económicos. Y en esta nueva cultura de guerra se tiene muy presente a España, con la aparición de la moderna guerra de guerrillas. Tiene el interés adicional de vincular aquellas guerras del siglo XVIII-XIX con situaciones actuales como la guerra de Irak. El modelo para entender Irak no es Argelia, ni Vietnam, sino la resistencia española a la ocupación francesa entre 1808 y 1813.