Se trata de uno de los textos más sugerentes de Paul Zumthor. Auténtico work in progress, contiene en cuatro breves lecciones la esencia de una lúcida y fecunda investigación desarrollada a lo largo de varias décadas. El autor aplica aquí las enseñanzas de su célebre Introducción a la poesía oral para resaltar tres aspectos fundamentales de la poesía medieval: la importancia de la voz y de sus efectos físicos, el hecho de que la obra sólo existe plenamente durante la performance y la condición subalterna del texto.