La pedagogía diferenciada implica una profunda evolución del sistema educativo, una nueva organización del trabajo que, a su vez, requiera otra forma de ejercer la profesión y, por lo tanto, una formación de los docentes más especializada en didáctica, en evaluación, en gestión de la heterogeneidad, pero también un desarrollo de competencias colectivas a nivel de equipos y centros escolares.Índice¿De vuelta a la Edad de Piedra? · La pedagogía diferenciada: entre la exigencia de igualdad y el derecho a la diferencia. La unificación de la educación y la exigencia de igualdad. La pedagogía diferenciada: visión de conjunto · Gestionar el «tiempo restante»: entre persecución y actitud de espera. Entre actitud de espera y persecución. Optimizar los procesos de aprendizaje. ¿Más tiempo para los alumnos lentos? El aprovechamiento óptimo del tiempo escolar y de la organización del trabajo. La gestión del tiempo: entre eficacia y autonomía · Espacios-tiempos de formación y organización del trabajo. ¿Una organización pedagógica inmutable? Los límites de la organización taylorista del trabajo escolar. · De la gestión de clase a la organización del trabajo en un ciclo de aprendizaje. ¿Gestión de clase u organización del trabajo? Un ciclo de aprendizaje plurianual. La gestión de un ciclo de aprendizaje plurianual · Dominar la individualización salvaje de los itinerarios de formación. La individualización de los itinerarios ¡sí existe! Dominar individualización de los itinerarios de formación · Saber organizar el trabajo escolar más allá de la clase, una competencia por desarrollar. La libertad para organizar el propio trabajo. Aprender a organizar el trabajo más allá de la clase. ¿Existen competencias generales en materia de organización del trabajo? Tres ejes de formación. Conclusión: Una escuela justa y eficaz