La publicación de esta Liturgia de las Horas semanal está concebida con un triple criterio de: selección, funcionalidad y utilidad pastoral; de ahí su polarización en las dos horas principales del Oficio divino, Laudes y Vísperas, que son el vértice y el quicio de la oración oficial de la Iglesia.El Diurnal completo, con la distribución de un ciclo de cuatro semanas y las variantes del propio, del tiempo y del santoral puede resultar demasiado complejo en su manejo. Esta es la razón de la presente selección de formularios oracionales, propuestos ordenadamente en cuatro esquemas de Laudes y Vísperas para los domingos y uno para los días feriales de la semana.