¿Puedo imprimir una amenaza en la red y aportarla junto a la demanda? ¿Puedo acreditar con un WhatsApp, SMS o correo electrónico la venta de un inmueble? ¿Puedo llevar mi ordenador al acto del juicio para que el Juez vea lo que se dice de mí en Twitter? Al albur de la era digital han ido apareciendo nuevas formas de relaciones entre las personas que se plasman en formatos hasta hace pocos años desconocidos. Su reciente incorporación, como una documental más, en los procedimientos judiciales ha provocado que exista poca jurisprudencia consolidada y, en consecuencia, gran variedad de criterios a la hora de su interpretación, siendo muy importante seguir los pasos adecuados para hacerla valer en el acto del juicio, ya que, en caso contrario, el Juez no podría tenerla en cuenta y sería posible incluso perder el pleito. Esta obra proporciona pautas para ello.