En La momia, la autora de las «Crónicas Vampíricas», vuelve a servirse de un personaje sobrehumano para someterlo a la más humana de las condiciones: la pasión. Ramsés es inmortal, vive a través de los siglos. Pero ha bebido el elixir de la vida y se ha convertido en Ramsés el Maldito, condenado a recorrer la tierra para saciar afanes que nunca verá satisfechos: de comida, de vino, de mujeres. La momia recobra la vida en el Londres eduardiano y regresa a El Cairo con la personalidad asumida del doctor Ramsey, egiptólogo. Le persigue el recuerdo de su última reencarnación como amante de Cleopatra. Su anhelo por la Reina de Egipto le lleva a cometer un acto que devastará los corazones de quienes le rodean.