La obra consiste en un análisis de la ideología falangista en los años anteriores a la Guerra Civil. Comienza con un capítulo histórico, para explicar los orígenes de la Falange en 1933 así como los orígenes de las JONS y su fusión con Falange en 1934. Pasa a continuación a estudiar los planteamientos estratégicos del grupo y su lucha por la hegemonía sobre otras fuerzas políticas de la derecha española. y se despliegan a partir de ahí los capítulos centrales del libro, dedicados a analizar las teorías de los falangistas iniciales en relación con su misión política, las bases sociales en que deberían apoyarse y los medios a utilizar; y al marco filosófico anti-racionalista en el que se inserta su visión del mundo y su teoría de la historia y las ideas centrales que la vertebran: élites-masas, juventud, acción, liderazgo, valores militares, nación, imperio, unidad. Aunque la obra carece de conclusiones, no es difícil adivinar, como explica José Álvarez Junco en el estudio introductorio, que la procedencia social de los dirigentes falangistas, comenzando por el propio José Antonio Primo de Rivera, les abocaban a ponerse al servicio del mantenimiento del orden social conservador, si bien por medio de una movilización de clases medias e incluso de alguna fracción del proletariado.