La ineficacia de los actos procesales es uno de los institutos del Derecho procesal que se ha visto más sometido a reformas y contrarreformas. Los vicios de los actos procesales pueden llevar aparejados tres efectos posibles: nulidad, anulabilidad e irregularidad. Esta aparente simplicidad encierra en su interior muchas dudas y contrastes acerca de la conceptualización, tratamiento y efectos de estos tres fenómenos de antijuridicidad. Dudas y contrastes que han llevado a la doctrina científica y a la jurisprudencia a esforzarse para lograr una teoría general de las nulidades que sin embargo a día de hoy no ha despejado todas las dudas. La ubicación de la regulación de las nulidades, la determinación conceptual de las distintas categorías de ineficacia, su conexión con los principios de subsanación y conservación de actos, así como los efectos anudados a la nulidad absoluta y a la anulabilidad (e irregularidad), siguen generando problemas de interpretación, circunstancia que conduce y explica que no pueda hablarse de un régimen de ineficacia de las actuaciones procesales sistemático y clarificador. La presente monografía se dirige precisamente a ofrecer una sistematización y clarificación de los citados conceptos, precedida de un estudio doctrinal y jurisprudencial serio y riguroso, que culmina con un epílogo a modo de reflexión final dirigido tanto a juristas en general como a abogados en particular, con las consideraciones y propuestas concretas, adaptadas, como no puede ser de otra forma, a la Ley 13/2009, de 3 de noviembre, de reforma de la legislación procesal para la implantación de la nueva Oficina judicial.