Este trabajo es un ensayo sobre lógica representacional, así como una invitación a mirar y a ver la obra pictórica de Egon Schiele desde una perspectiva especial, que se sitúa en el entramado de las relaciones filosófico-artísticas característico de la Viena finisecular, al lado de la poesía de Georg Trakl o de las composiciones de Arnold Schönberg. Por un lado, se analizan las diferentes formas en las que la obra de Schiele se muestra a sí misma, girando en torno a la noción de Darstellung, tan importante en la filosofía de Ludwig Wittgenstein. Por otro. Se desentraña la gramática pictórica subyacente al conjunto de la obra de Schiele, a partir del análisis pormenorizado de un número considerable de sus obras. Todo esto se hace desde una aplicación de la estética wittgensteiniana que se distancia de las interpretaciones al uso.