El fallecimiento no supone el fin de la relación que en vida nos une con Hacienda, sino que la prolonga y determina el nacimiento de nuevas obligaciones tributarias para el causante, sucesores, herederos, legatarios y demás, finalizando únicamente tras la presentación de los correspondientes tributos, en los que el Impuesto sobre Sucesiones es el más representativo, con su liquidación y firmeza. Esta obra pretende dar a conocer la regulación jurídica básica de la tributación de las herencias, en especial, del mencionado Impuesto, y trata aquellas situaciones de conflicto principales en los elementos esenciales del tributo, como son la declaración, la liquidación y la determinación de la cuantía de la deuda tributaria tras el fallecimiento, lo que ofrece una garantía para el asesoramiento fundamentada en los criterios de la Dirección General de Tributos y resoluciones de Juzgados y Tribunales en las transmisiones mortis causa.