España es un país con textura federal. Su historia y composición social hacen del caso español un tipo ideal para un ordenamiento político que auspicie la federalización del Estado de las Autonomías. En la sustanciación de dichos asertos se concentra el empeño fundamental del presente libro. España, como nación de naciones, ha estado sujeta a una rivalidad interna que ha aportado incentivos a su dinamismo civilizador y a su genio creativo. La cohesión social y cultural de España está en la base de su unidad, la cual no oculta oposiciones intrínsecas. Ni siquiera los largos períodos de autoritarismo han conseguido los propósitos de homogeneización y sometimiento al patrón de una España exclusiva y excluyente. Este libro analiza el proceso de federalización de España aportando un esclarecimiento de conceptos tales como etnicidad, nación y estado. Su autor realiza un repaso de la historia de España y expone los rasgos del modo de concurrencia múltiple etnoterritorial que caracteriza sus relaciones sociopolíticas. Tras examinar el fenómeno de la identidad dual, que se manifiesta en una lealtad compartida de los ciudadanos hacia las instituciones centrales y autonómicas, se prescriben escenarios de futuro en el desarrollo federal de España.