El viaje de un niño de nueve años a través de la estepa ucraniana, rumbo al instituto en que habrá de cursar sus primeros estudios, dibuja la línea argumental de La estepa (1888), la novela corta que proporcionó a Chéjov reconocimiento y le convirtió en un escritor de éxito. En El barranco (1900) el adulterio alterna con el asesinato y los más variados delitos.