Los actores de reparto de esta narración son algunos modelos cartográficos y varios mapas, todos ellos levantados en el mundo ibérico y en el contexto renacentista de la expansión marítima. El protagonista principal es un mapa, un modelo, el llamado "Padrón Real¿"de la Casa de la Contratación de Sevilla, el primer mapa del imperio, un mapa imposible, un mapa que, en definitiva, nunca existió. "La espada, la cruz y el Padrón" cuenta la historia de un modelo cartográfico único, un artefacto que pretendió ser al mismo tiempo un mapa y muchas representaciones, esto es, la imagen oficial del mundo en el contexto expansionista, evangelizador y globalizador de la monarquía hispánica a lo largo del siglo XVI. El "Padrón" pretendía ser también un mapa secreto y se convirtió en un secreto a voces. Este estudio se presenta como un análisis epistemológico sobre la representación cartográfica española de la temprana Edad Moderna a través de sus mapas y sus modelos cartográficos. A lo largo de estas páginas se procura averiguar cuál fue el significado de algunas de las representaciones cartográficas más emblemáticas del mundo ibérico y qué funciones debían cumplir para convertirse en buenos mapas. Con este objetivo, se atiende al establecimiento de prácticas cartográficas en la Casa de la Contratación y a su producción cartográfica, especialmente aquella vinculada al "Padrón Real".