La universidad demanda personas competentes en la capacidad de transmitir el conocimiento que se adquiere en las diferentes materias de estudio. En pleno siglo XXI, la trayectoria de un universitario no puede verse condicionada ni trabada por su nivel de competencia comunicativa, por tener dificultad para expresarse por escrito; todo estudiante debe saber utilizar el lenguaje como instrumento de comunicación escrita, de representación, interpretación y comprensión de la realidad, de construcción y comunicación del conocimiento y de organización y autorregulación de su pensamiento Los planteamientos que han llevado a elaborar esta publicación se podrían concretar en los siguientes aspectos: Contenidos: la estructuración de los capítulos pretende ser una guía de actuación para trabajar la escritura académica desde un planteamiento de centro, abarcando las diferentes fases que conlleva: diagnóstico de la escritura académica, propuestas para la creación de un proyecto lingüístico de centro y, finalmente, pautas específicas para trabajar la escritura académica basadas en las principales dificultades que nos estamos encontrando en el mundo universitario. Contexto: el análisis de la realidad a la que nos enfrentamos en el día a día de nuestra labor docente sirve de partida para planificar una formación específica a lo largo de los cursos académicos, de manera que el alumnado afronte con éxito el dominio lingüístico del C1 al finalizar sus estudios de grado. Destinatarios: las sugerencias de actuación que aparecen en este trabajo se pueden aplicar a cualquiera de las titulaciones que conforman el panorama actual de la enseñanza superior. Pues, si bien se ha analizado el perfil de los estudiantes de los grados en Educación Infantil y Primaria, se ofrecen unos materiales –rúbricas de evaluación– y unas propuestas de actuación que abarcan tanto el plano académico como el futuro profesional.