Millones y millones de documentos circulan anualmente en las oficinas y empresas de todo el mundo. El tráfico de Internet se duplica cada doscientos días. Alrededor de doscientos mensajes fluyen diariamente hasta los despachos de los directivos... ¡Bienvenido a la economía de la atención, en la que el nuevo recurso no son las ideas, ni siquiera el talento, sino la atención propiamente dicha! Esta obra innovadora sugiere que las empresas de hoy en día están condenadas al desastre... a menos que consigan superar los déficits de atención que amenazan con alterar sustancial y negativamente el concepto de trabajo actual. Thomas Davenport y John Beck, consultores de Accenture y expertos en el tema, explican que, para los hombres de negocios, los mayores problemas se concentran en los dos elementos de la ecuación de la atención: captar y mantener la atención de los empleados, consumidores y accionistas, abrumados por la cantidad de información que se les viene encima; y dividir su propia atención frente a una gran variedad de alternativas. ¿El dilema? Aprender a gestionar este recurso esencial y limitado o fracasar. Partiendo de la base de convincentes investigaciones, los autores describen cuatro perspectivas de la gestión de la atención fundamentales para la comprensión de su incidencia en la empresa: primero, la evaluación y la distribución de la atención; segundo, la comprensión y el equilibrio de sus dimensiones psicológicas; tercero, el dominio de tecnologías más recientes y más eficaces; y cuatro, la asimilación de las enseñanzas de otros sectores, como la publicidad. Con estas perspectivas, los autores arrojan nueva luz sobre las áreas empresariales básicas, incluyendo el comercio electrónico, el liderazgo organizativo, la gestión de la información y el conocimiento, y la estrategia