"Rastreando los orígenes de la religión" Las extraordinarias historias del Santo Grial han cautivado a los lectores desde la época medieval. El Grial es la copa de la que bebió Jesús en la Última Cena pero este símbolo se puede rastrear hasta mucho antes de la aparición del cristianismo. Una serie de singulares descubrimientos relativos a la Edad del Bronce en Europa llevaron al investigador y escritor Alan Butler a reconsiderar qué representa en realidad el Santo Grial. Y la ineludible verdad era que el Grial es un símbolo repleto de matices femeninos, y que su importante lugar en la religión moderna se debe a la subsistencia de un imperativo religioso que es probablemente tan antiguo como la misma humanidad. Este descubrimiento fue sumamente excitante, pero resultó ser sólo la punta de un gran iceberg. A través del colorido tapiz de la historia, Alan ha podido identificar lo que él mismo describe como un «hilo de oro». Desde mucho antes de la aparición del cristianismo, hubo personas que consagraron su vida a perpetuar las antiquísimas creencias religiosas centradas en torno a la Gran Diosa. Ésta es una historia que abarca más de cinco mil años, y que atañe a algunos de los grupos más fascinantes y misteriosos de la historia, como el de la poderosa e influyente hermandad guerrera de la Orden del Temple.