A Marguerite Duras le gustaba cocinar, algo que afirmaba con entusiasmo. No sólo cocinaba sino que también disfrutaba redactando sus propias recetas, inventando incluso nombres de platos en su cuaderno rojo, El cuaderno del Camión, como ella lo llamaba. La Cocina de Marguerite es un pequeño libro que guarda en su interior apuntes y un particular recetario de cocina popular y cuya lectura pretende descubrir al lector una faceta desconocida de la escritora; Marguerite Duras y la cocina, una actividad cotidiana para la que no dudaba, con una sonrisa, en considerarse tan autora como para la escritura. Aquellos lectores que esperen encontrar en este libro recetas muy elaboradas pronto se sentirán decepcionados. Algunas son completamente imprecisas, en ocasiones escritas de manera descuidada, pero siempre transmiten cierta frescura y el toque de sentido del humor que la caracterizaba.