«La belleza sencilla de Taizé» constituye el primer estudio integral de las manifestaciones estéticas de la Comunidad ecuménica de Taizé, en el que se muestra cómo la belleza, la sencillez y la provisionalidad juegan un papel esencial en su vocación. El libro presenta una evolución histórica de la arquitectura, haciendo especial hincapié en la construcción y sucesivas transformaciones de la Iglesia de la Reconciliación; de la liturgia y la música, desde los primeros ensayos de la formación del oficio litúrgico y la renovación del canto monástico hasta la configuración de una oración común que permite participar activamente a los jóvenes a través de los llamados «cantos de Taizé»; y del arte, tanto de los itinerarios personales de algunos hermanos artistas como de su papel en la creación común. En Taizé, la belleza se ofrece como un camino que transitar, en el que la experiencia estética y la experiencia religiosa van de la mano, un camino inspirado por las intuiciones espirituales del hermano Roger, fundador de la Comunidad.