La obra parte de los antecedentes históricos que han dado forma a la banca y han configurado su planteamiento de negocio, para mostrar como muchas de las innovaciones financieras actuales tienen su antecedente en la antigüedad. En ella se presta especial atención a la liberación del sistema financiero español exponiendo como las entidades bancarias se han visto inmersas en un proceso de competitividad creciente y en todas las direcciones. Así, también se desarrollan los nuevos desafíos a los que la banca española se ha tenido que enfrentar desde su regulación hasta la competitividad global actual como: la evolución permanente de productos y servicios, nuevas formas de gestión y el impacto de las nuevas tecnologías de la información.