«El proceso catequístico, en síntesis, es un proceso armónico, orgánico y global, en el que los distintos pasos se compenetran con el fin de lograr la maduración del cristiano. Junto a la Traditio o entrega del mensaje cristiano, es fundamental redescubrir la Redditio, o sea, la capacidad del sujeto de adherirse existencialmente al anuncio y volver a narrar con palabras y hechos todo lo que le ha sido entregado. Precisamente porque, con frecuencia, falta esta Redditio, hay que considerar también la Receptio fidei, es decir, la atención a las condiciones reales en que se encuentra la persona y, por consiguiente, a los ámbitos de vida a los que hay que llegar con el mensaje del Evangelio» (núm. 27). Educar y expresar con la vida y con la palabra lo que se ha recibido: en esto consiste la Redditio (núm. 24).(Incontriamo Gesù - Orientamenti per l’annuncio e la catechesi in Italia, CEI, 2014)