A lo largo de su fugaz carrera, Joy Division tuvo tiempo para alumbrar Unknown Pleasures y Closer. Dos trabajos pivotales, sin los que jamás podría tenerse la baraja completa del universo pop. Joy Division: el fuego helado se adentra en el increíble proceso que dio lugar a este par de clásicos indiscutibles. El Ying y el Yang. El blanco eterno de la portada de Closer frente al negro en relieve de Unknown Pleasures. La transversal conexión uterina de dos falsos hermanos gemelos; Closer y Unknown Pleasures son discos que, más que ningún otro par de obras en la historia del pop, se retroalimentan entre ellos mediante un visceral y aterrador choque de contrarios. Desde los escombros industriales de la lóbrega Manchester hasta las vías de escape soñadas por Ian Curtis. Entre las páginas de Joy Division: el fuego helado, Marcos Gendre se sumerge a pleno pulmón en el origen de estas dos criaturas, dando las claves de su inmenso reflejo en el pop actual. Entre medias, no faltarán singles como Atmosphere, Transmission y Love Will Tear Us Apart, mucho más que simples hijos pequeños de las obras capitales. Imprescindible, tanto para expertos como para iniciados, Joy Division: el fuego helado va más allá del culto a Ian Curtis, y nos regala un relato inspirador y apasionado sobre un volcán de música incandescente. Corazón y alma. Siempre ardiendo.