Ante ciertos problemas de salud, la medicina tradicional no encuentra solución. Los medicamentos, por ejemplo, no alivian el dolor crónico de cabeza o las tensiones musculares. La terapia craneosacral, por otro lado, intenta localizar las tensiones del cuerpo a través de una forma especial de contacto, de suaves toques. El cuidadoso trabajo realizado con las manos puede tratar muy efectivamente los dolores de espalda, los trastornos ocasionados por el estrés y una larga lista de problemas físicos, además de activar el poder autocurativo del organismo. Al contrario que en el masaje clásico, el terapeuta no ejerce ninguna presión de forma activa. Más bien dirige su cuidadoso tratamiento basándose en las condiciones internas previas del paciente, siguiendo sus tejidos de forma pasiva en la dirección en la que más fácil resulta conseguir su relajación. Cuanto más blando está el tejido, mejor pueden fluir tanto la sangre como la linfa y los fluidos corporales, lo que hace que aumenten las posibilidades de mejoría. Este libro explica las bases y las aplicaciones de la terapia craneosacral de forma muy completa y, a la vez, fácil de entender. La parte práctica, ricamente ilustrada, incluye ejercicios tanto individuales como para realizar en pareja y dedica también un apartado al tratamiento de bebés y niños.