Francisca Martín, la insignificante mandadera del monasterio de la Concepción en la villa segoviana de Ayllón, ha sido pastora en su pueblo hasta que decidió huir de un padre brutal y de la amenaza de un matrimonio impuesto. Nadie diría que tras su humilde aspecto se esconden una brillante inteligencia y un talento especial para descubrir enredos y oscuras tramas criminales. A lo largo de sus investigaciones, pondrá de manifiesto su peculiar sentido de la justicia y defenderá su dignidad como mujer, en una sociedad en proceso de cambio y que los varones se empeñan por controlar cada vez con más dureza. Pero también tendrá que enfrentarse a los fantasmas de un pasado que le ha enseñado a valorar la libertad por encima de todo.