¿Qué queremos decir cuando al proclamar el Credo afirmamos “creo/creemos en la Iglesia”? A esta cuestión dan respuesta los diversos capítulos/lecciones en los que se trata de pensar la Iglesia creída poniendo de manifiesto los aspectos más determinantes de lo que constituye el entramado doctrinal de la eclesiología. La pretensión última que alienta estas páginas es la de avanzar hacia una Iglesia creíble, y en este empeño están embarcados cada cristiano y cada comunidad eclesial.