Todo conocimiento es una secuencia de lo previo pero no est exento de ser considerado una tempestad. Sucede cuando los cimientos que se intentan reformar est n muy anclados en el tiempo y en la praxis. La historia de la circulaci¢n de la sangre evolucion¢ a travs de tres saltos fundamentales. El inicial, obrade Claudio Galeno (siglo II d.C.) perdur¢ hasta 1628, cuando William Harvey publica Exercitatio anatomica motu cordis et sanguinis in animalibus, sentandola moderna fisiolog¡a ciculatoria. A pesar de su principio de raz¢n suficienteno le fue sencillo alconocimiento de Harvey destronar los catorce siglos de la hegemon¡a impuesta por el sistema circulatorio de Galeno. La sangre no se agotaba en la periferia, como cre¡a el pergameno. Hacia 1980 Francisco Torrent Guasp inicia fisuras en la compensi¢n de la mec nica cardiaca reinante. Concibeuna explicaci¢n anat¢mica adaptada a la realidad de su funci¢n. En la experiencia que origina este texto Fisiolog¡a de la succi¢n cardiaca, se detalla un recorrido del est¡mulo diferente al descrito por Torrent Guasp, y es el que explica la fase de torsi¢n del coraz¢n definida como el movimiento de rotaci¢n contrapuesta de la base y del pex. La activaci¢n analizada concibe entre la s¡stole y la di stole, una tercera fase de acople activa de succi¢n, con contracci¢n muscular, gasto energtico y ca¡da notable de la presi¢n intraventricular,conformando un coraz¢n de tres tiempos.