Dos años decisivos en la vida de Walter Benjamin, 1932 y 1933, estuvieron vinculados de un modo muy especial, y hasta podría parecer que un tanto sorprendentemente, a la isla de Ibiza. Durante aquellos dos años, la trayectoria vital y literaria del escritor berlinés se vio afectada profundamente por una crisis de carácter personal. A su precaria situación económica y a su carencia de expectativas profesionales se sumó muy pronto la irrupción de otra crisis, la de su propio país, con el derrumbe de la economía y el ascenso del nazismo al poder. Como muchos otros, Benjamin se vio obligado a salir de Alemania; en su caso, para no volver jamás. Por lo general, esta página ibicenca de su trayectoria suele pasarse, sin embargo, con bastante rapidez, a pesar de que en ella dejó escritos algunos de sus textos más lúcidos y apuntó motivos y situaciones que se convertirían pocos años después en temas prioritarios de su reflexión. El principal objeto del presente libro consiste en describir las razones que lo llevaron hasta Ibiza.