Ser excluido significa ser desposeído del derecho irrenunciable a participar, algo que resulta imprescindible para mantener la dignidad personal y social. La exclusión no es una realidad única, sino parte de un continuo que puede ir desde situaciones tan extremas como el genocidio o la tortura, hasta situaciones cotidianas, aparentemente normales, que impiden que una persona pueda participar en relaciones sociales satisfactorias. Sin duda, las situaciones de exclusión revisten extrema gravedad, por las consecuencias dañinas que causan en las personas excluidas. Se trata de un fenómeno amplio, que requiere el análisis de sus nuevas formas y su ubicación en distintos entornos.En este libro se presentan las aportaciones de diversos investigadores sociales, que estudian el fenómeno de la exclusión, sus formas y consecuencias, en distintos grupos y contextos sociales.