Los economistas aterrados con su Manifiesto pusieron en evidencia que en Europa es necesaria y posible otra política económica. En su nuevo libro profundizan en el análisis de las causas que han llevado a la Unión Europea al borde del abismo. En primer lugar, una política injusta y ciega. Los economistas aterrados explican de manera accesible y clara que, en lugar de resolver el problema, lo están agravando: los Estados que se han endeudado excesivamente para salvar a los bancos se encuentran ahora controlados por esos mercados financieros, que les imponen condiciones que ahogan el crecimiento económico. Este círculo vicioso, que empezó en Grecia, Irlanda y Portugal, para extenderse a España e Italia, se está conviritiendo en una nueva recesión a escala mundial. Los economistas aterrados proponen para salir de la crisis, en lugar de continuar disminuyendo el gasto público de manera tan drástica, la emisión de bonos europeos para hacer frente a la especulación, reformar el Banco Central Europeo, reestructurar las deudas públicas y armonizar la política fiscal incrementando los impuestos a las grandes fortunas. Reducir el déficit como única política, con independencia de la situación económica de cada país, agravará aún más la crisis y las desigualdades sociales. Es lo que pretende el nuevo Tratado de la U.E., propuesto por Merkel y Sarkozy el 9 de diciembre de 2011. Estamos ante una situación extrema que puede significar el fin del proyecto europeo y tenemos que elegir entre dominación de los mercados, estallido del euro o solidaridad europea. Porque Europa será social, ecológica y solidaria o no será.